Las mujeres podemos cortejar, lo hemos hecho toda la vida, pero usamos códigos distintos, señas que te inspiren a querer ir tras nosotras. Por que no ir en busca de lo que queremos y tomarlo? Si quiero un hombre, lo puedo tomar? El problema está en si te interesa lo que le pase a tu reputación luego de eso, pero que carajo importa tener una buena reputación si soy una reprimida, que carajo importa lo que piensen de mi si no hago lo que me dictan mis impulsos. De que sirve la reputación en la cama?
La Leyenda del colibrí de Gastón Figueira (Uruguayo) Flor – una hermosa india de grandes ojos negros – amaba a un joven indio llamado Agil. Éste pertenecía a una tribu enemiga y, por tanto, sólo podían verse a escondidas. Al atardecer, cuando el sol en el horizonte arde como una inmensa ascua, los dos novios se reunían en un pequeño bosque, junto a un arroyo juguetón, que ponía un reflejo plateado en la penumbra verde. Los dos jóvenes podían verse sólo unos minutos, pues de lo contrario despertarían las sospechas de la tribu de Flor. Una amiga de ésta – una amiga fea, odiosa – descubrió un día el secreto de la joven y se apresuró a comunicárselo al jefe de la tribu. Y Flor no pudo ver más a Agil. La Luna, que conocía la pena del indio enamorado, le dijo una noche: - Ayer vi a Flor que lloraba amargamente, pues la quieren hacer casar con un indio de su tribu. Desesperada pedía a Tupá que le quitara la vida, que hiciera cualquier cosa con tal de librarla de aquella boda terrible. Tupá oy...
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